A mi pequeñina, nunca estarás sola allí donde estes..

A mi pequeñina con todo mi corazón
Era un dia de septiembre tal que las mismas fechas que ahora pero cuatro años atras, entró por la puerta mi hermano con una gatita moribunda, apenas se mantenia en pie, la habia encontrado en un descampado solita maullando, llorando en busca de cariño, y dio la casualidad de que mi hermano pasara por su lado antes de que el frio del otoño cayera sobre ella. Y asi llego a mi casa, parecia como de color gris, estaba sin fuerzas, pero desde el primer dia la cuidamos, la dimos de comer la bañamos, y el color gris paso a ser un color marroncito precioso con el cuello y la tripita blanquitos, con el tiempo fue creciendo. ahora el recuerdo de su sufrimiento me hace daño, me duele por dentro y las lagrimas en estos dias salen solas, quizas no deberia llorar mas, sé que ella no se lo merece, su recuerdo solo tiene que darme alegria, alegria por haberla conocido y haber tenido la posibilidad de disfrutar tantos momentos con ella, la recuerdo en mi cama durmiendo y acercandose de madrugada a mi pecho tumbandose encima mia ronroneando, no me importaba que me despertara de madrugada, la abrazaba y nos quedabamos durmiendo juntas, su cabecita debajo de mi cuello y su corazon junto al mio. Siempre ha sido muy juguetona, nos venia a saludar cada vez que llegabamos a casa, se subia en la mesa y ponia el cuello para que la dieramos un beso, era su bienvenida. Le gustaba mirarnos boca abajo encima de la tele mientras estabamos todos juntos (era una postura muy graciosa), era una mas , el jueves pasado se me fue a otro lugar, a otro lugar,dejó de latir su pequeño corazon entre mis manos, rodeada de todos los que la queremos. Ahora cuando llego a casa me parece verla en cada uno de sus lugares preferidos, el recuerdo la trae de nuevo a nosotros. Hasta luego mi chiquinina, mi Yara.